El amor, carcomido por la pasión, torna en desavenencias incongruentes. Las mentiras no escapan en el pasado, son perseguidas por la sencillez del presente.
Rascarnos mutuamente la bola se ha tornado en un juego sin, no final feliz, tan sólo sin final. Jugar al escondite pierde toda su magia si mientras, se esta pensando en el farol a echar en otra partida de truc. La falsa ignorancia no exculpa. Y al final ni tan siquiera se condena al cargo de conciencia. Se pasa de un juego a otro esgrimiendo el estandarte de la impunidad y las buenas maneras. (¡Que somos buenas personas coño!). Retruco.
Da gracias amigo, por el flaco favor. Flaco, pero al fin y al cabo favor, por descubrir el puchero antes de estar servido en la mesa, y tener que engullirlo. Envida con veintinueve de culo y obliga a dar un paso atrás, que por lo menos te llevas una.
El amor, carcomido por la pasión, torna en desavenencias incongruentes. Las mentiras no escapan en el pasado, son perseguidas por la sencillez del presente.
ResponderEliminarRascarnos mutuamente la bola se ha tornado en un juego sin, no final feliz, tan sólo sin final. Jugar al escondite pierde toda su magia si mientras, se esta pensando en el farol a echar en otra partida de truc. La falsa ignorancia no exculpa. Y al final ni tan siquiera se condena al cargo de conciencia. Se pasa de un juego a otro esgrimiendo el estandarte de la impunidad y las buenas maneras. (¡Que somos buenas personas coño!). Retruco.
Da gracias amigo, por el flaco favor. Flaco, pero al fin y al cabo favor, por descubrir el puchero antes de estar servido en la mesa, y tener que engullirlo. Envida con veintinueve de culo y obliga a dar un paso atrás, que por lo menos te llevas una.
Be water my friend.