En este mundo comercial, quien vende, vende. Independientemente de lo que haya hecho Tiger Woods recupera patrocinadores. No importa que haya engañado a su mujer con prostitutas y mujeres fáciles durante muchos meses, no importa que haya engañado a sus hijos, no importa que llevara una doble vida. Ha sido volver a la competición y volver a recibir contratos de patrocinio. Parece que la tormenta ha pasado y que el culebrón “Tiger” está en punto muerto. Después de los escándalos sexuales, la separación de su mujer y el internamiento en una clínica para tratar su adicción al sexo, Tiger Woods comenzó una campaña de arrepentimiento, entonando el Mea Culpa, que ha dado resultado. Esto ha animado a sus antiguos sponsors a volver a trabajar con él.
El primero que vuelve a apoyar al deportista mejor pagado del 2009 es Nike. La marca deportiva ha creado una campaña para presentar al “nuevo Tiger Woods”. Un Tiger renovado, arrepentido, víctima de su enfermedad que promete volver a ser el número uno, el más rentable para las empresas.
Mucho ánimo Tiger, que siempre serás uno de los deportistas mejor pagados del mundo. Ale, ya puedes volver a gastarte el dinero con quien quieras, por ejemplo, pagando 7 millones de dólares a una de tus amantes para que no abra la boca.
El primero que vuelve a apoyar al deportista mejor pagado del 2009 es Nike. La marca deportiva ha creado una campaña para presentar al “nuevo Tiger Woods”. Un Tiger renovado, arrepentido, víctima de su enfermedad que promete volver a ser el número uno, el más rentable para las empresas.
Mucho ánimo Tiger, que siempre serás uno de los deportistas mejor pagados del mundo. Ale, ya puedes volver a gastarte el dinero con quien quieras, por ejemplo, pagando 7 millones de dólares a una de tus amantes para que no abra la boca.
Quizá el perdón sea un bien preciado, pero codiciarlo, aunque razones se tengan, resulta al final no merecerlo. Pecadores tirando piedras a otros pecadores.
ResponderEliminarNo digo que este hombre, si es posible llamarlo así, las verdades quedan a nuestro juicio proscritas, esté actuando con rectitud, pero puede que no merezca pasarse el resto de la vida debajo de un puente arrepintiéndose de sus actos. Porque yo también cometo errores y doy gracias por el dolor en mi conciencia cuando soy perdonado.
¿Que es millonario? Sí. ¿Que lo va a seguir siendo? Sí. ¿Que te parece solo una campaña publicitaria? Lo siento. ¿Que merece el repudio perpetuo de todo el mundo? A mi parecer no. No me debería importar en que profanaciones gaste su dinero ganado por el golf si existe quien lo hace aún peor, con fondos menos honrosos y ni yo ni nadie hace nada al respecto.
Vivo, si me dejan vivir.
Por supuesto merece seguir con su vida y por supuesto hay quien se enriquece de manera menos honrosa, pero también hay quien se pasa la vida trabajando y luchando por sus sueños de manera honrada y no tiene lo mismo que Tiger ni tendrá nunca sus oportunidades.
ResponderEliminarDiscutir sobre quién merece tener lo que posee y quién no es igual que intentar ponerse de acuerdo sobre cuál es el sexo de los angeles, o sobre cuándo será el fin del mundo.
ResponderEliminarSi creeis que podeis hacer justicia en el mundo me parece una meta honradisima. Ahora bien, ni flagelando a Tiger ni difamando sobre otros que sean peores que él (que no niego que así sea) arreglareis nada.
¿Quereis un mundo más justo? Empezar por serlo en TODOS los aspectos de vuestra vida e intentar que los más cercanos a vostros también lo sean. Y si me quereis replicar con que ellos son figuras públicas y deberían por ello dar ejemplo porque llegan a más gente, la respuesta es afirmativa al 100%. Pero no creo que esté en nuestras manos juzgar intenciones de otros por muy ninfomano que sea ni por muy corrupto, porque eso si que no puede hacerlo NADIE en el mundo.
¿Quién sabe los motivos que le llevan a esta gente a cometer sus actos? La cuestión es que los ha hecho y ha pedido perdón públicamente. Que sea verdadera o no esa disculpa nadie, excepto él, lo sabe.
Únicamente podemos responder de nuestros propios actos y qué lástima que seamos tan malos jueces y abogados de nosotros mismos. Quizá por eso queramos hacerlo con los demás.
Te doy la razón!
ResponderEliminar