¿A alguien se le ha ocurrido pensar que nuestro carácter puede estar relacionado según te guste el dulce o el salado?. A mi no se me había ocurrido, la verdad. Me lo han dicho esta mañana en plan de broma y me he dedicado a hacer esta pregunta a la gente de mi alrededor: ¿Qué prefieres, dulce o salado?. Curiosamente, aquellos que me han contestado dulce son más cariñosos, tiernos, tímidos y alegres; y los que me han contestado salado son más serios, controladores, perfeccionistas...
Yo soy salada en mi mayoría: un poco fría, cuando tengo que serlo, bastante perfeccionista y demasiado controladora en algunas ocasiones. No me importa decirlo, lo reconozco.
¿Y TÚ, DE QUIEN ERES?
Yo soy salada... :) muy bueno, la verdad yo tmp lo habia pensado :) aunq tb soy muy cariñosa eh :)
ResponderEliminarLiLi
Puede que sea mi ego el que me lleve a disentir, porque segun este razonamiento, mi gusto no coincide con mi personalidad.
ResponderEliminarYa he escuchado la direccionalidad de la afirmacion, es decir, la personalidad conforma el gusto. Aplicándome el cuento, ni soy perfeccionista, ni controlador, ni serio. Una buena napo de queso pasada por la plancha antes que una empalagosa tarta de chocolate recién hecha. Sí, prefiero el salado.
Me encanta reir y más aún hacer reir, mejor si es de mí mismo, demostrarme que soy mas blandito de lo que creo. Me gusta sentirme insignificante contemplando una buena noche estrellada. Prefiero una noche al calor de la lumbre con alguien perfecto, que el éxito, en cualquier campo. Aunque no lo parezca.
Las excepciones tienden a confirmar la regla. Se ve que soy un mikado, algun cable andará haciendo chispa.